[vc_row][vc_column][vc_column_text]Con renovadas fuerzas y fuentes de financiamiento el colectivo Espacio Santa Ana se prepara para llevar un 2018 cargado de trabajo y actividades para el Cerro Cordillera.
Como parte de la estrategia de financiamiento para el desarrollo de actividades enfocadas en la recuperación de espacios, la memoria local, el incentivo al desarrollo artístico y cultural tanto del Cerro Cordillera como de la región de Valparaiso, durante el año 2017 el colectivo Espacio Santa Ana considera como vía de financiamiento la postulación a fondos del estado para continuar con el trabajo que lleva desarrollando de manera sostenida por cerca de nueve años.
De esta manera para este periodo 2018 el colectivo se adjudico 4 fondos importantes relacionados con el área del desarrollo organizacional, desarrollo cultural y reconstrucción patrimonial. Se tratan de: Programa OIC- Otras Instituciones Colaboradoras; FICC- Fondo de Iniciativas Culturales Comunitarias de Red Cultura CNCA, Patrimonio Cultural e infraestructura Cultural del CNCA
Sumando un total de $314,588,499 para la gestión, rehabilitación, reconstrucción y desarrollo de actividades en el cerro.
¿Que significa para el territorio y el colectivo la adjudicación de estos fondos?
Para el colectivo es un gran desafío ya que por primera vez en sus años de funcionamiento, el colectivo se integra -luego de haber postulado sin logros el año 2016- al programa Otras Instituciones Colaboradoras, el OIC, destinado para la manutención y desarrollo del equipo humano, que años antes mediante la inversión en tiempo de trabajo y voluntariado había logrado sostenerse. Los proyectos adjudicados años anteriores corresponden principalmente al mejoramiento de la infraestructura del Cerro Cordillera como lo es la rehabilitación de la Capilla Santa Ana y su casona contigua que albergó al Hogar de Niñas Maria Goretti hasta mediados del año 2012, sumándose este año la posibilidad de continuar con la rehabilitación de la Casona y el fortalecimiento de la cultura organizacional del colectivo.
Para la comunidad significa la habilitación de espacios de encuentro y cultura que son bien escasos en el cerro.
Para Marcelo Gonzalez del Área de Autogestión y Proyectos: “En primer lugar significa un reconocimiento a la gestión que hemos ido realizando. Es una especie de reconocimiento externo a como hemos venido haciendo las cosas. En el marco de la gestión es un indicador de crecimiento en la organización ya que los requisitos que permiten adjudicar requieren de una serie de ciertos estándares que permiten inferir que hemos crecido como organización. Hay que recordar que OIC es un programa del CNCA, no un fondo para programación cultural, si bien considera algo de programación cultural, su foco está en mejorar la gestión de las organizaciones. Significa una responsabilidad en la administración de estos fondos por cuanto no son bajos y representan un cambio de mirada respecto a lo que estamos haciendo, el desarrollo del mismo proyecto va a implicar una serie de desafíos para nosotros, este programa representa una visión que esta teniendo, en este caso el CNCA, que nos parece muy interesante, por que hasta antes de este programa, no había recursos disponibles para que las organizaciones pudieran subsistir. Tiene que ver con la mantención de la organización en el largo plazo. Lo que también significa que las políticas publicas han ido entendiendo un poco el desarrollo artístico y permiten darse cuenta que no basta solo con financiar la creación artística, sino que para que la creación artística tenga un sentido, necesita un soporte, una plataforma desde donde estructurarse”.
Milenka Cucurella, una de las coordinadoras de la Escuela Popular de Artes Escénicas de Calle comenta acerca de la participación de la escuela en el programa OIC de la itinerancia del grupo de las Ratitas de Valpo comenta: “La participación en el programa posibilita hacer itinerancias interregionales, talleres y formación generando estabilidad y proyección en el grupo, como una certeza de que todos pueden participar más allá de su condiciones o de sus posibilidades económicas, entonces da una base en la cual de puede trabajar más seguro. Lo otro es que también consolida al grupo, le da una homogeneidad a lo heterogéneo que es el grupo, algunas somos madres, otros tienen otras responsabilidades, entonces en la medida que damos una base, somos todos iguales, todos nos vamos juntos y comemos juntos. Eso genera esta comunión del colectivo que es súper importante dar esa posibilidad porque cohesiona y fortalece el trabajo.”
“Es harto trabajo, paralelamente debemos saber planificar y poder cumplir con lo que nos piden en los convenios, que son los contratos que tenemos con el consejo. Hay un proyecto nuevo, un edificio nuevo es igual un desafío grande que se implantó Santa Ana al querer hacer ese trabajo y se suma con toda la renovación de pavimento y ventanas que ya habían hecho, junto con la capilla, en gestión y administrativamente hay harta pega y con nuevos planteamientos viendo desde el punto de vista que cachamos con la cooperativa por la cantidad de gente no se pueden abarcar los proyectos, entonces ahí aparecen las posibilidades de contratar mas gente o hablar con otra cooperativa de trabajo, personas del cerro para que paralelamente puedan trabajar los proyectos, y nosotros como Santa Ana como mandantes. Ver la posibilidad que en los procesos de reconstrucción que hay, más que nada en la capilla o también en el edificio nuevo se abren varias oportunidades, talleres de como trabajar madera, tierra, adobe, revoques y fierro también, si bien son pegas de oficio pueden estar enmarcadas en lo que se pretende hacer con los Talleres de Oficio en la Casona, es una alternativa probable.” Comenta Miguel del Área de Infraestructura del Espacio Santa Ana.
[/vc_column_text][vc_video link=»https://youtu.be/nc-VNCUNWDk «][vc_column_text]¿Qué permite la adjudicación de estos fondos?
Permite el desarrollo de varias actividades con directo beneficio en el territorio del Cerro Cordillera y el colectivo Espacio Santa Ana, posibilitando llevar a cabo quehaceres tales como:
Fondo FICC: Este fondo nos proporcionará recursos para el desarrollo de talleres de formación organizacional en torno a nuestra matriz económica, permitiendo la evaluación sobre la oferta de fondos nacionales, internacionales, públicos y privados pertinentes a la Organización; la implementación de un software para la sistematización de ingresos y egresos de caja; la realización de la planificación financiera estratégica 2018-2020; el diseño de un Manual de Uso y arriendo de Espacios y Equipos (sala de música, salón de danza/teatro,cine) que rescate las buenas prácticas entorno al mantenimiento de equipos de implementación e Inmueble; Realizar Encuentros de Formación en Elaboración de Proyectos de Desarrollo Psicosocial con organizaciones culturales comunitarias de Valparaíso.
Dentro del fondo OIC: el desarrollo de un estudio de diseño y elaboración del modelo de gestión a largo plazo; Formación en planificación estratégica; Formación en gestión cultural; Ciclos de cine; Seminarios de programación y participación cultural con énfasis en el cooperativismo; Escuela taller de Arte y Oficio. Financiamiento para itinerancia y los talleres de la escuela carnaval EPAC: música, danza, teatro, mascaras; Asesorías para el funcionamiento de una incubadora de cooperativas en el ámbito de la cultura; Habilitación y mejoras en las distintas salas.
Patrimonio: El proyecto de consolidación estructural a desarrollar en esta oportunidad, corresponde a la tercera etapa de consolidación de la Capilla Santa Ana, el cual ha sido desarrollado bajo una lógica colaborativa con la comunidad que vive en el cerro Cordillera. Cabe destacar que tanto la primera etapa y la segunda etapa de consolidación, ha contado con capacitaciones y puesta en valor de técnicas constructivas en tierra y madera para la comunidad.
Infraestructura Cultural: El inmueble a intervenir es parte integral de la manzana patrimonial, también integrada por la Población Obrera de la Unión y Capilla Santa Ana. Corresponde a una estructura perimetral de ladrillo trabado de dos niveles, complementado con adobillo, que corresponde a la batería de baños del Ex- Hogar Maria Goretti.
Desafíos: Postular, Implementar, ejecutar, relacionar
“Es necesario enfatizar que uno de nuestros puntos en común es el fortalecimiento organizacional tales como sostenimiento de un grupo humano con capacidad de desarrollar e implementar procesos de rehabilitación y recuperación de hábitat y la posibilidad de que estos saberes puedan replicarse a otros grupos y comunidades organizadas. También hemos notado la necesidad de elaborar un software que permita dar transparencia administrativa y fluidez en la gestión de los procesos internos que se vienen desarrollando hasta la fecha.” Comenta Alvaro Neira integrante del Área de Arte y Cultura.
Para Rany Carneiro integrante del Área de Comunicaciones de Espacio Santa Ana: “En mi visión, el desafío empezó en el proceso de reflexión necesaria que nos lleva a la postulacion al programa OIC y los otros fondos adjudicados. Este desafío sigue en lo que es la ejecución de las actividades, que ya realizamos de forma autogestionada como espacio y sin financiamiento, que han sido enmarcadas en el programa y los fondos, en la área de la cultura, formación y trabajo de rehabilitación de inmuebles. Siento también que el gran desafio de ese año es la mantención de la casa abierta, funcionando con las distintas actividades y talleres, junto a la ejecución del fondo Infraestructura Cultural, en el patio. Viviremos el año con una buena dosis de paciencia y respeto al trabajo del otro, prácticas a las cuales apuntamos. Además de la posibilidad de la proyección del espacio, para la realización de trabajos continuados y a largo plazo.”
Para Miguel Hervé: “hacer un proyecto como este (batería de baños) igual es un desafío, es probable que trabaje un buen número de gente. Comunitariamente hay un desafío de hacer un proceso de formación para los vecinos, que tenga la capacidad de organizarse y resolver de manera colectiva o en conjunto necesidades que tengan en común, es más menos lo que apuntamos con el cooperativismo como una herramienta para poder organizarse para ver cómo podemos resolver algunas necesidades según problemáticas que tengamos en común y más adelante por qué no un poco ver la posibilidad de ver otros terrenos pensando en construir viviendas sociales a un costo de construccion conveniente para un colectivo como este, como organización, es un desafío mayor.”
Nuevos caminos, pero los mismos objetivos para un colectivo que se ha consolidado trabajando para el Cerro Cordillera y su comunidad.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
