COMUNICADO MESA COMUNITARIA POR LA SALUD DIGNA

POR LA REHABILITACIÓN DEL EX HOSPITAL NAVAL DE PLAYA ANCHA COMO ESTRATEGIA DE SALUD PÚBLICA FRENTE A LA CRISIS SANITARIA PRODUCIDA POR EL COVID-19

Las usuarias y usuarios de la salud pública de Valparaíso agrupados/as desde el año 2018 en la Mesa Comunitaria por la Salud Digna, nuevamente queremos manifestar nuestro desacuerdo y molestia respecto a las políticas pública de salud llevadas a cabo en nuestro país por este y los anteriores Gobiernos; no sólo a partir de la crisis sanitaria actual, sino también por la visión centralista, tecnócrata y mercantil que desde hace más de 30 años se ha venido implementando. Visión errada que hoy nos hace enfrentar la pandemia del COVID-19 con una débil infraestructura sanitaria, en condiciones laborales paupérrimas para el desempeño de las/os trabajadoras/es de la salud y la consiguiente escasez de insumos y materiales para una atención digna de las personas. Todo esto debidamente señalado, evidenciado y denunciado desde hace más de dos años por la Mesa y diversas organizaciones sociales ligadas con la salud. Basta con revisar las conclusiones del VI Congreso Nacional de Salud para confirmarlo.

En este contexto, debemos recordar que la comuna de Valparaíso no necesita una pandemia mundial como la actual para colapsar sus servicios de salud. Invierno tras invierno vemos como colapsan los centros de atención llegando incluso a producir muertes simplemente por falta de, por ejemplo, ventiladores mecánicos o camas UCI, tal y como sucedió con Amelia Salazar Jorquera el 4 de julio de 2018 en el Hospital Carlo Van Buren.

Por ello, nos preocupa de sobre manera la sensación triunfalista que mediáticamente el Gobierno actual quiere instalar, sobre todo considerando que nos encontramos ad portas de la llegada del invierno y además con una pandemia en desarrollo que no ha llegado a su peak. Frente a esto, la autoridad monopoliza los procesos de toma de decisiones y la información, actuando de manera arrogante sin considerar la mirada de quienes
habitamos los territorios que actualmente tienen bajo su control.

Muestra claro de aquello es ver cómo mientras muchos países y ciudades han volcado parte importante de sus esfuerzos en habilitar camas y centros de atención de salud de emergencia pensando en el bienestar de las personas, en Chile no se pierde la oportunidad de lucrar y generar negocios a partir de la crisis sanitaria. Tal es  el caso del ya conocido arriendo del Espacio Riesco de Santiago como hospital temporal.

Sin embargo, la situación de Valparaíso es aún más crítica. Con un sistema de atención de salud primaria totalmente desbordado y desfinanciado, sumado al desmantelamiento de una infraestructura de salud, proyectamos una situación crítica para los próximos 3 meses. Resulta paradójico observar cómo desde fines de la década de los 80 poco a poco la ciudad de Valparaíso fue perdiendo hospitales sin reponerlos; primero el
Hospital Enrique Deformes, luego el Hospital Ferroviario y el Hospital Alemán. Con una ciudad en crecimiento poblacional, fuimos cambiando “suelos” destinados a una función pública, hacia usos como el Congreso Nacional, o peor aún, para condominios de segunda vivienda para la elite; los suelos pasan así a cumplir roles especulativos y de inversión financiera de la cual se benefician los/as de siempre.

¿Qué sucede con esto?. Lo lógico, no contamos hoy con la infraestructura hospitalaria para enfrentar esta compleja situación sanitaria. La solución de la autoridad sanitaria: arrendar el Hotel O’Higgins o estar pensando arrendar algunos hoteles de Valparaíso, incluso el VTP, para instalar hospitales de emergencia que luego serán desarmados. No podemos estar más en desacuerdo.

Frente a esto venimos a proponer, tal y como ya lo han hecho otras organizaciones, una solución que resulta del todo lógica. En vez de invertir no pocos recursos en hospitales de emergencia, solicitamos que la Armada de Chile entregue al control civil de las dependencias del Ex Hospital Naval de Playa Ancha para ser habilitado, primero, como infraestructura de apoyo para enfrentar la crisis y luego para ser habilitado como Hospital Materno Infantil integrado a la red de salud pública. Más aún, estamos en condiciones de apoyar dicho proceso de habilitación a partir de nuestras capacidades técnicas de gestión, construcción y coordinación.

Creemos que es un momento propicio para que el Gobierno actual descentralice el proceso de toma de decisiones y transfiera espacios de participación real a las organizaciones que desde hace ya mucho tiempo han estado impulsando la defensa y fortalecimiento de la salud pública.

MESA COMUNITARIA POR LA SALUD DIGNA

Correo MCSD: mesacomunitaria.salud@gmail.com

Otras noticias